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Predica del domingo 01 de Noviembre del 2015. Jehová es mi luz, mi salvación y la fortaleza de mi vida. Pastor Pedro Ramirez Suarez de la Iglesia Bethel de Lima - Perú. Hebreos 1:5 Porque ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Mi Hijo eres tú, Yo te he engendrado hoy, y otra vez: Yo seré a él Padre, Y él me será a mí hijo? Hebreos 1:6 Y otra vez, cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle todos los ángeles de Dios. Hebreos 1:7 Ciertamente de los ángeles dice: El que hace a sus ángeles espíritus, Y a sus ministros llama de fuego. Hebreos 1:8 Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo; Cetro de equidad es el cetro de tu reino. Hebreos 1:9 Has amado la justicia, y aborrecido la maldad, Por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo, Con óleo de alegría más que a tus compañeros. Hebreos 1:10 Y: Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra, Y los cielos son obra de tus manos. Hebreos 1:11 Ellos perecerán, mas tú permaneces; Y todos ellos se envejecerán como una vestidura, Hebreos 1:12 Y como un vestido los envolverás, y serán mudados; Pero tú eres el mismo, Y tus años no acabarán. Hebreos 1:13 Pues, ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Siéntate a mi diestra, Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies? Hebreos 1:14 ¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de la salvación? Salmos 27:1 Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme? Salmos 27:2 Cuando se juntaron contra mí los malignos, mis angustiadores y mis enemigos, Para comer mis carnes, ellos tropezaron y cayeron. Salmos 27:3 Aunque un ejército acampe contra mí, No temerá mi corazón; Aunque contra mí se levante guerra, Yo estaré confiado. Salmos 27:4 Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo. Salmos 27:5 Porque él me esconderá en su tabernáculo en el día del mal; Me ocultará en lo reservado de su morada; Sobre una roca me pondrá en alto. Salmos 27:6 Luego levantará mi cabeza sobre mis enemigos que me rodean, Y yo sacrificaré en su tabernáculo sacrificios de júbilo; Cantaré y entonaré alabanzas a Jehová. Salmos 84:10 Porque mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos. Escogería antes estar a la puerta de la casa de mi Dios, Que habitar en las moradas de maldad. Salmos 84:11 Porque sol y escudo es Jehová Dios; Gracia y gloria dará Jehová. No quitará el bien a los que andan en integridad. Salmos 84:12 Jehová de los ejércitos, Dichoso el hombre que en ti confía. Salmos 46:1 Dios es nuestro amparo y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Salmos 46:2 Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida, Y se traspasen los montes al corazón del mar; Salmos 46:3 Aunque bramen y se turben sus aguas, Y tiemblen los montes a causa de su braveza. Selah Isaías 12:1 En aquel día dirás: Cantaré a ti, oh Jehová; pues aunque te enojaste contra mí, tu indignación se apartó, y me has consolado. Isaías 12:2 He aquí Dios es salvación mía; me aseguraré y no temeré; porque mi fortaleza y mi canción es JAH Jehová,(A) quien ha sido salvación para mí. Isaías 12:3 Sacaréis con gozo aguas de las fuentes de la salvación. Isaías 12:4 Y diréis en aquel día: Cantad a Jehová, aclamad su nombre, haced célebres en los pueblos sus obras, recordad que su nombre es engrandecido. Isaías 12:5 Cantad salmos a Jehová, porque ha hecho cosas magníficas; sea sabido esto por toda la tierra. Isaías 12:6 Regocíjate y canta, oh moradora de Sion; porque grande es en medio de ti el Santo de Israel. Hebreos 10:19 Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo, Hebreos 10:20 por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne, Hebreos 10:21 y teniendo un gran sacerdote sobre la casa de Dios, Hebreos 10:22 acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura. Hebreos 10:23 Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió. Hebreos 10:24 Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; Hebreos 10:25 no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca. Hebreos 10:35 No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene grande galardón; Hebreos 10:36 porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa.