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Marcos 2: 23-3: 6 23 Y aconteció, que él por los sembrados un día de reposo; y sus discípulos comenzaron, a su paso, para arrancar las espigas. 24 Entonces los fariseos le dijeron: Mira, ¿por qué hacen en sábado lo que no es lícito? 25 Y él les dijo: ¿Nunca leísteis lo que hizo David cuando tuvo necesidad, y era hambre, él, y los que estaban con él? 26 cómo entró en la casa de Dios en los días de Abiatar sumo sacerdote, y comió los panes de la proposición, que no es lícito comer sino a los sacerdotes, y dio también a los que estaban con él? 27 Y él les dijo: El sábado fue hecho para el hombre y no el hombre para el sábado; 28 Así que el Hijo del hombre es Señor aun del sábado. 3 Otra vez entró en la sinagoga; y había allí un hombre que tenía una mano seca. 2 Y le acechaban para ver si le sanaría en sábado; que acusarle. 3 Entonces dijo al hombre que tenía la mano seca: Levántate. 4 Y él les dijo: ¿Es lícito hacer bien en sábado, ó hacer mal? para salvar la vida, o quitarla? Pero ellos callaban. 5 Y cuando él mirándolos alrededor con enojo, entristecido por la dureza de sus corazones, dijo al hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y su mano fue restaurada sana como la otra. 6 Y salidos los fariseos, tomaron consejo con los herodianos contra él, para matarle.