3m 54slongitud

Queridos hermanos, hoy nos reunimos en la Eucaristía para escuchar a Jesús en el Evangelio que nos dice “SOIS SAL DE LA TIERRA Y LUZ DEL MUNDO”. Muchas veces pensamos sobre este tema y cómo atraer a los hermanos a la fe. Si nosotros queremos ser buenos cristianos y discípulos de Jesús, debemos ser sar: dar sabor con el bien, el servicio, la generosidad, el Evangelio, la paz; y ser la luz de la fe, dar sentido a la vida de todos con el amor y las buenas obras. Jesús es la luz del mundo y nosotros debemos iluminar a los hermanos que viven en la oscuridad. Jesús, nos pide ser semillas de unidad, de esperanza y de salvación.