Te invitamos a rezar junto a todos los que en la Fundación La Merced ponemos nuestro esfuerzo para erradicar la explotación infantil de nuestra sociedad. Ora con nosotros... Y le presentaban niños para que los tocase; y los discípulos reprendían a los que los presentaban. Viéndolo Jesús, se indignó, y les dijo: Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan; porque de los que son como ellos es el reino de Dios. En verdad les digo, que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él. Y tomándolos en los brazos, poniendo las manos sobre ellos, los bendecía. (Mc 10, 13-16) Madre querida de la Merced, tú que recibiste en tu seno al Salvador del mundo, te pedimos por todos los papás y mamás para que acojan con generosidad a sus hijos e hijas. Tú que cuidaste a Jesús desde pequeño, haz que nuestra sociedad cuide y proteja a todos los niños y niñas que se ven obligados a trabajar. Tú que acompañaste y guiaste a tu Hijo por los senderos de la vida, ayúdanos a guiar y educar a nuestros hijos, no permitiendo que ningún niño o niña sea explotado. Tú que quieres lo mejor para nosotros, llena nuestros corazones de amor y misericordia para poder eliminar de nuestra sociedad el trabajo infantil. Que los gobernantes de las naciones no sean cómplices del abuso infantil y luchen por ofrecer un presente y un futuro digno a los más pequeños. María, junto a ti queremos ser merced y ofrecer libertad a los niños y niñas, que son los preferidos de tu Hijo Jesús. Mamá María, te pedimos por todos los niños y niñas del mundo que deben trabajar para vivir; por aquellos que no tienen papás; por aquellos que son amenazados, explotados y esclavizados; por los niños y niñas que sufren violencia en sus hogares, por aquellos que viven en la calle y también por los que, teniendo todo materialmente, pasan todo el día con los juguetes, la televisión o los celulares en lugar de estar con su familia. Madre querida de la Merced, que todos los niños y niñas del mundo seamos felices. Escúchanos, Madre. Amén.
