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Dios todopoderoso, por el resplandor de la presencia de tu Hijo, has purificado un mundo corrupto por el pecado: Te pedimos humildemente que continúes siendo nuestra firme defensa contra los ataques de nuestros enemigos; y concede que nuestras casas, Iglesias, represas, cementerios, y todo lo que en Venezuela haya sido manchado o profanado por la malicia de Satanás o por la maldad humana, sea purificado y limpio por tu permanente gracia; permite que nuestras casas, Iglesias, represas y campos santos, depurados de toda contaminación, sean restablecidos y santificados a la gloria de tu Nombre; mediante Jesucristo nuestro Señor, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, ahora y por siempre. Amén