Un gran Mensaje que aún tiene gran impacto en el Mundo Visite el viejo templo de Nueva Inglaterra, donde JONATHÁN EDWARDS predicó su conmovedor sermón: Pecadores en las manos de un Dios airado. Edwards sostenía el manuscrito tan cerca de los ojos, que los oyentes no podían verle el rostro. Sin embargo, al acabar la lectura, el gran auditorio estaba conmovido. Un hombre corrió hacia él clamando: "¡Señor Edwards, tenga compasión!" Otros se agarraban de los bancos pensando que iban a caer en el infierno. Vi cómo se abrazaban a las columnas para sostenerse, pensando que había llegado el juicio final. "El poder de aquel sermón aún tiene un gran impacto en el mundo entero. Sin embargo, conviene conocer algo más de su historia, la parte que generalmente se suprime. Durante tres días Edwards no había tomado ningún alimento, y por tres noches no durmió. Había rogado a Dios sin cesar: "¡Dame la Nueva Inglaterra!" Después de levantarse de orar, cuando se dirigía al púlpito, uno de los de allí presentes dijo que su semblante era como de quien, por algún tiempo, hubiera estado contemplando el rostro de Dios. Aun antes de de abrir la boca para pronunciar la primera palabra, la convicción del Espíritu Santo cayó sobre el auditorio" De Regreso a La Historia: https://www.facebook.com/pages/De-regreso-a-la-Historia-Defensa-del-Evangelio-/172723532864910
